GONZALO DE OYÓN (Fragmento) – Julio Arboleda
Es un valle feliz: su tierra ondula
En continuas i plácidas colinas,
Que la brisa al pasar besa i adula:
Por ese valle en ondas cristalinas
El agua precipítase i circula
Serpenteando entre flores purpulinas;
I al fin de aquel Edén verde i riente
La ilustre Popayán alza la frente.
Do sus colinas altas amparada,
Como la tigre que asechanza teme
I espera el can al árbol recostada,
Detras del curvo cerro de la Eme
Se la mira de lejos engastada:
Desde el Cauca, a la luz del sol, que treme
Sobre la alba ciudad en grupos varios
Se ven surgir los pardos campanarios
Aquí la vasta cordillera empina
En fantásticos riscos su cadena;
Allí en vaiven, elástica se inclina
Sobre el talle jentil do la azucena,
La flor, ante la brisa matutina;
Acá el arroyo por la selva suena;
I vése el llano i su pintada alfombra
Que interceptan los montes con su sombra;
I la fruta silvestre, donde toma
Su grato olor la brisa pasajera
Para mezclar al de la flor su aroma;
I el canto de la tórtola agorera,
Cuando la noche en el Oriente asoma;
I el variado matiz de la pradera,
Que gusto, olfato, oido, vista halagan,
I, deleitando el cuerpo, el alma embriagan